viernes, 20 de febrero de 2015

CARONTE ESPERA SU PAGO

Dentro del maremagnum que ha significado el secuestro de Antonio Ledezma, han pasado por debajo de la mesa tres hechos de extrema gravedad y que nos indica con claridad que la Constitución es letra muerta: 1) encuentran muertos a dos estudiantes en Mérida, que fueron detenidos por la policía en una manifestación. Afirman que los cuerpos presentaban signos de tortura y varios disparos en la cabeza. 2) en la cuenta de twitter de Andreína Baduel (hija del Gral. Raúl Baduel), el motín en Ramo Verde ocurrido ayer, se debió a que "sometieron a una requisa infamante a una bebé, quitándole el pañal y abriéndole las piernas para verle sus partes". 3) hallan muerto a otro estudiante de la UNET en Táchira desaparecido desde el 6 de febrero. Estos sucesos deben llamarnos a la reflexión, seamos chavistas o no. Todos estamos expuestos a la barbarie de un régimen totalitario, auto crático, y sin ningún tipo de pudor ni remordimiento. A quien simpatice con el chavismo, le recuerdo que el Gral. Raúl Baduel, el compadre y salvador de su comandante eterno sigue en prisión por mostrarle su desacuerdo con el rumbo que estaba tomando el país. Hoy más que nunca se requiere una reacción de todos. Si no lo hacemos estaremos navegando, no por el mar de la felicidad, será por el río Aqueronte rumbo al infierno comunista. ¿Qué haremos?, ¿reaccionamos o le pagamos a Caronte?.

lunes, 16 de febrero de 2015

LA DEGRADACIÓN DEL OTRO COMO ARMA POLÍTICA

La interacción humana cuando obedece a lo humano, a lo simple, suele ser sencilla, mientras que, el conocimiento la va haciendo más compleja. Es así como muchos se han aprovechado de la ignorancia de otros, los han manipulado, y han llegado a ejercer sobre ellos un poder humillante y empobrecedor. Es harto conocida la frase de Simón Bolívar, “un pueblo ignorante es instrumento ciego de su propia destrucción”. Durante la primera mitad del Siglo pasado, un bachiller era considerado una persona ilustrada. Son muchas las historias que se refieren a alguien como “el bachiller” en tono de respeto y reconocimiento. En noviembre de 1991 obtuve el título de Economista en la Universidad de Carabobo, y en 1998 alcancé una Especialización en Finanzas. Desde ese entonces mi formación académica ha sido empírica y autodidacta, muy especialmente en mi área de trabajo. Eso sí, en lo poco que he leído, aprendí que el mejor ilustrador es el periódico. Durante 25 años fui asiduo lector de El Universal y El Carabobeño. A partir del cambio de dueños y la autocensura, deje de comprar El Universal, y leo algunos artículos por su website. Una de las razones era Carlos Raúl Hernández, que a pesar de no coincidir con él en sus planteamientos, siempre me pareció una lectura interesante, digamos “ilustradora”. Escribir, para mí, es la necesidad de comunicarme con quienes no conozco, de expresar mi opinión y posición ante situaciones que se presentan en el día a día, en un lenguaje sencillo, y lo he hecho, entendiendo que encontraré comentarios en desacuerdo. Son muy pocas personas que los leen, sin embargo, para mi es suficiente que alguien lo haga. Sea quien sea, y por supuesto, excluyendo a mí esposa. Mi primera lectora. Eso quizá, a la luz de sus últimos artículos, y de su formación académica, me hace un “semi-ilustrado”, término con el que descalifica a quienes pensamos distinto a él, ¡el hombre es un Ph. D y Mg. S en Ciencia Política, escritor y más!, es un hombre “ilustrado”, y con capacidad para “ilustrar”, y en vez de utilizarla para convencernos, lo que hace es descalificarnos, y menospreciarnos con calificativos como el citado, o “antipolíticos”, “chorlitocracia”, y otros más. Ya lo escribí anteriormente, respecto a su artículo “Empuñar La Lengua”. Alguien preguntará, ¿y qué tema tienes tú contra Carlos Raúl? La verdad ninguno, ni siquiera lo conozco personalmente. El único sentimiento que tengo hacia él es respeto, por su conocimiento, formación académica, y por su manera de escribir. Y debo reconocer, que mi último escrito, me parece que lo leyó, y atendió a mi solicitud de re-tuit. Esta vez no lo haré. Lo dejo a tu libre albedrio. Leerlo me ha “ilustrado”, pero eso no significa que automáticamente tenga que darle la razón. El que sea “ilustrado” no lo hace dueño de la verdad. Esta puede estar donde tú menos esperas. Por supuesto, tampoco lo soy. Y aunque en un momento seamos quien tiene la razón, aun así, no nos hace dueño de la verdad. Esto es de especial relevancia, aunque desde el punto de vista político soy un “semi-ilustrado” (y también en otros temas), y él un “ilustrado”, si algo no es blanco y negro es la política. Si algo está lleno de matices es la política. Mantener una posición absoluta en ella, es convertirse en un extremista. Es un término muy ligado a la violencia en cualquier tema, sin embargo, no siempre es así. Ser extremista es colocarse a un extremo de una situación, donde no se admite algo distinto a lo que se cree. Las religiones son extremistas, pero no todas son violentas, salvo el catolicismo y el libre albedrio. Mi posición ha sido clara, he votado desde que tengo el derecho y deber de hacerlo, y lo seguiré ejerciendo mientras lo tenga. Pero hay momentos políticos que exigen algo más, y la transición a un régimen autocrático es uno. Hablar de los resultados electores, a partir de 2007 es redundar, es ser repetitivo, y eso no me agrada. Pero al parecer, en política hay que repetir las cosas ene cantidad de veces para que tengan valor, pero como soy un “semi-ilustrado” no lo haré. A quien lea esto, le pido que haga ese repaso. Uno de las cosas que decimos los venezolanos de nosotros mismos, es que tenemos memoria corta, que olvidamos con facilidad los sucesos importantes del pasado que rigen nuestro presente y futuro. En lo particular, hago excepción. No olvido, que en 1996, año en que Hugo Chávez es liberado, advertí qué pretendía. No olvidó que ofreció freír en aceite la cabeza de los adecos. No olvido que en medio de la tragedia de Vargas, citó a Simón Bolívar para que la gente fuera a votar. No olvido que hizo apología del delito cuando dijo que si él tuviera la necesidad también robaría, para justificar el ascenso de la delincuencia que ya sabemos a dónde ha llegado. No olvido la estupidez de la oposición al desaprovechar el momento político del año 2002. No olvido que en 2007, Chávez, al reconocer que perdió el referéndum constitucional dijo que nos quedáramos con nuestra victoria de mierda. Tampoco olvido, que fue un estratega excepcional, en especial porque no tenía escrúpulos, y al verse derrotado para las elecciones parlamentarias de 2010, simplemente recurrió a sus empleados en el CNE y ellos actuaron. Modificaron los circuitos electorales, con lo que perdieron en votos pero ganaron en diputados. No olvido que las presidenciales de 2010 fueron cuestionadas por Capriles y la MUD, y menos olvido las presidenciales de 2012 donde Capriles y la MUD cantaron fraude a los cuatro vientos, con un llamado a la calle, y el posterior recule a ese llamado. Recuerdo, que Capriles dijo que si salimos a protestar él no se responsabilizaba de lo que sucediera. Tampoco olvido que en las elecciones regionales de 2012 nos dieron una paliza que nadie esperaba, ganando sólo 3 gobernaciones y algunas alcaldías ¿Alguien puede explicar con sensatez por qué pasó esto, si supuestamente, se habían ganado las presidenciales? No olvido las expropiaciones, confiscaciones, y destrucción del aparato productivo privado. No olvido RCTV, Cemex, y Agroisleña. Tampoco olvido a Franklin Brito, Simonovis, Afiuni, Baduel y su familia, Vivas, Forero, y los policías metropolitanos, los muertos de abril de 2002, y los pistoleros de Puente Llaguno. Los miles de muertos por la delincuencia desbordada. No olvido a Ceballos, Enzo, Salvatore, Leopoldo, los estudiantes detenidos y torturados, Loreth, Sairam, Gabriel. No olvido “La tumba”. No olvido que hay detenidos por escribir un tuit, y hasta por hacer una predicción astrológica. No olvido los muertos de 2014, esos muchachos que se lanzaron a la calle por su libertad, por su futuro. Que lo hicieron, no porque alguien les indujo, si no por sus convicciones. No olvido las palabras de Maduro, de que candelita que se prende, candelita que se apaga, y de llamados a ataques fulminantes. No olvido a Marvinia, salvajemente golpeada, y sin justicia. No olvido las muertes de Geraldine, Génesis, Bassil, Robert, y tantos otros a los que pido disculpas por no mencionarlos. No olvido el dolor de sus familiares. No olvido que Henry Ramos Allup, responsabilizó a Leopoldo, María Corina y Ledezma de esas muertes por haber convocado La Salida, cuando declaró que, al menos, su propuesta de diálogo no provocó muertos. Ese, que convoca al diálogo pero no admite que alguien opine distinto, un déspota que se disfraza de demócrata. No olvido que José Ramón Medina hizo lo mismo, y que utilizando el populismo exacerbado calificó la devaluación del SIMADI de “paquete neoliberal, ¿se puede ser más “semi-ilustrado”. No olvido que los economistas advirtieron la crisis que se avecinaba, y tampoco olvido que Capriles dijo en enero de este año que ahora si era el momento de la protesta. No olvido que los presos políticos han recibido más apoyo del extranjero que de quienes se hacen llamar oposición. No olvido a Lilian luchando con persistencia por la libertad de su esposo y de los presos políticos. No tengo memoria corta, y si algo no recuerdo, busco, me documento, leo. No olvido que el gobierno, comenzó a mutar en régimen autócrata tras perder el referéndum constitucional, avalado por una oposición que sólo espera ganar elecciones. No olvido que el régimen ha utilizado y seguirá usando el fascismo como arma represiva y comunicacional. No hay que ser “ilustrado” para entender lo que sucede, ni siquiera hay que ser “semi-ilustrado”. Solo tener sentido común. Basta recordar lo sucedido en los últimos 16 años. Basta leer la hermosísima resolución 8610. Basta ver cómo se ha instaurado un Estado paralelo, distinto al que tenemos en la Constitución Nacional más violada y pisoteada en la historia patria, pero si se parece al que se pretendía instaurar por vía electoral y no se pudo. Esto no es una estulticia ni simple ni compleja, eso no existe, una tontería, es una tontería, y lo que generalmente provocan es risa, ¿te provoca risa la situación que vivimos?, ¿crees que es gracioso?, ¿crees que las luchas por los derechos humanos es una estulticia?, ¿crees que luchar por un futuro mejor es una pendejada? Calificas de “sabio” con sarcasmo a quien considera que con dictadores no se negocia, ¿me puedes explicar el resultado del diálogo político de 2014?, ¿me puedes explicar que pasó con el diálogo económico de ese mismo año, y donde el régimen colocó como premisa que el modelo no cambiaba?, ¿me puedes explicar que pasó con el diálogo económico que el régimen terminó dictando una serie de leyes fiscalistas y confiscatorias de lo privado, y llena hasta los tuétanos de socialismo?, ¿me puedes explicar que pasó con el diálogo económico y las confiscaciones a Farmatodo y Día a Día y la detención de sus directivos?, ¿me puedes explicar cómo con la cara más dura anuncian una mega-devaluación? Efectivamente, como afirmas, Bolívar y Morillo se reunieron en secreto, pero lo hicieron en medio de una guerra, no de elecciones. Hasta donde yo sé, luego de esa reunión continuaron las batallas, y por tanto, los muertos, ¿o no fue así? Definitivamente no es una estulticia la transición de gobierno a régimen autocrático, como acertadamente lo define Soledad Morillo en su artículo “Toda una Metáfora”. Pero si es una estulticia, porfiar, “disputar y altercar obstinadamente y con tenacidad”, o “continuar insistentemente una acción para el logro de un intento en que se halla resistencia”. Empeñarse en que el camino electoral es el único, es una estulticia. Lo bueno de ser un semi-ilustrado, es que sabemos que tenemos mucho que aprender. Que sabemos que el conocimiento es infinito, y que jamás alcanzaremos a saberlo todo, y sin embargo, haremos el esfuerzo por incrementarlo. Al calificar a alguien como “semi-ilustrado”, te calificas de “ilustrado”, eso es simple vanidad, y significa menosprecio por quienes tenemos una menor formación académica. Este no es un momento de intelectuales, de discusiones en peñas o conversatorios, es un momento de ciudadanos conscientes de la perdida de la libertad y la patria. En este momento impera el sentido común y el instinto de supervivencia. Eso que hizo a la humanidad la especie dominante en el planeta. Es momento de inteligencia y acción.

lunes, 2 de febrero de 2015

CARLOS RAÚL, ELEVAR LA VOZ DE LA PROTESTA, NO ES EMPUÑAR LA LENGUA

Nuevamente escribo una respuesta a Carlos Raúl Hernández, esta vez se trata del artículo publicado el día de ayer en El Universal intitulado “Empuñar la Lengua”. Una de las razones por la que aun leo este periódico es por el reto que ha representado para mí la opinión de Carlos Raúl, que aunque no la comparto, guardó un profundo respeto por ella. Aunque estoy en desventaja, él es ampliamente conocido, y sus artículos se publican en varios periódicos, así como en la web. Mientras, mis reflexiones las publico en mi blog, y son pocos quienes la leen. Espero que Carlos Raúl lea este artículo, y tenga la deferencia de difundirlo para equilibrar un poquito las cosas. Voy a hacer a un lado las variopintas y “cultas ofensas” a quienes piensan distinto, a quienes han manifestado a viva voz que la protesta es el camino, y al hecho de que, como siempre, no menciona a nadie, supongo que pensará: ¡a quien le caiga le chupa!, que por cierto, es extraño para quien coloca el diálogo como la panacea de la crisis política, económica y social que vivimos. Crisis provocada ex profeso por el régimen. Los lobos han significado mucho para la humanidad. Los hemos usado para darle cuerpo a la maldad humana. Carlos Raúl no escapa de esto, “cuando el adversario es un lobo rabioso, revolucionario y artillado, hay menos pérdida en hablar que caerse a mordiscos con él”. ¿Cómo quien compara al adversario con un lobo rabioso revolucionario y artillado puede siquiera pensar en hablar con él? ¿Cómo se dialoga con la maldad? ¿Qué hizo el cazador para salvar a Caperucita del lobo?, ¿habló con él? Aunque aún no la he visto, The Grey (Un Día para Sobrevivir) narra la experiencia de un grupo de trabajadores petroleros, sobrevivientes de un accidente aéreo, acechados por una manada de lobos grises. Los lobos son animales muy inteligentes, organizados y pacientes en la cacería, y estrictamente apegados a la conducción del macho alfa, el líder. Creo que se los comen a casi todos, y la única opción del personaje principal es retar al líder de la manada. No sé cómo termina, pero seguro el tipo no le pidió que se sentara a su lado para “dialogar”. Agradezco a quien lea esto no me cuente el final de la película. Efectivamente, el adversario es un lobo rabioso revolucionario y artillado, es el lobo rabioso de un régimen colectivista, que impondrá su modelo a sangre y fuego, sin importarles lo que piense u opine la mayoría. Proponer, desde la oposición que, “nadie debe cansarse de poner sobre la mesa la necesidad del diálogo y tener como bandera los principios democráticos, especialmente contra jaurías histéricas”, es un sin sentido, demuestra la pérdida humana del sentido común, y por tanto del instinto de supervivencia. Más temprano que tarde, el que se esconde, el que huye, el que pretende hablar con el lobo, termina siendo cazado. Carlos Raúl afirma: “nadie quiere que chorree sangre, sangre de familiares y amigos”. En eso estamos de acuerdo, la mayoría del país también lo piensa, pero de allí a sentarse a esperar a que el régimen se siente a dialogar hay un largo trecho. Existe la protesta no violenta. Estoy convencido de que debemos organizarnos, como ciudadanos, para luchar contra el régimen. Desde que Hugo Chávez salió de prisión, mostró su carácter agresivo y violento. Propio de los líderes colectivistas. Recuerdo que dijo que, iban a freír las cabezas de los adecos en aceite hirviendo. Es cierto que “fue el Galáctico quien estigmatizó el diálogo, cuando en la campaña electoral de 1998, ante una amable y tolerante invitación de Claudio Fermín, respondió con lo que ahora es el estilo nacional. "No tengo nada que dialogar con Uds. ladrones que han destruido a Venezuela", afirmación que compartió la mayoría del electorado”. Pero debemos recordar, que también lo invocó cuando se vio la soga al cuello. Utilizó el diálogo como un arma política de disuasión, para calmar los ánimos, y mostrarse como un demócrata ante los venezolanos y el mundo. Con ello, logró superar la adversidad, y sumió a la mayoría de la oposición en un letargo del que aún no despierta. Y ésta es la enseñanza del galáctico, bien aprendida por la MUD, el falso diálogo, el engaño que ello significa. Les hizo creer que con un régimen colectivista se puede dialogar, y lo más triste es que lo creen con fervor, al punto de son ellos quienes lo proponen. Pero también, el galáctico sembró el odio, la división, la lucha de clases. Son 16 años de odio, violencia y muerte. ¿Cómo juzgar a quienes muestran su odio como respuesta a ello?, ¿con qué derecho? Entiendo y respeto el desacuerdo con quienes muestren su odio al régimen, pero nada les otorga el derecho a juzgarlos, y a erigirse como los dueños absolutos de la verdad, hacerlo, los convierte en lo mismo que el galáctico. Creerse superiores, con un intelecto que nos rebasa, y desdeñar de todo el que piense distinto. Esos son los verdaderos hijos y herederos del galáctico. Afirmar que “para reinstalar la democracia, el diálogo no es una opción, sino la opción, independientemente de los resoplidos, graznidos o gruñidas que se profieran”, y luego, expresar respecto al embargo a Cuba que “fue el principal argumento para esparcir por el mundo la mentira que encubrió la miseria de los cubanos y distraer de la terrible realidad, universalmente demostrada, de que el colectivismo conduce a la desgracia, como vuelve a comprobar Venezuela”, es justo a lo que me refiero. Debemos resignarnos a la imposición de ese modelo, y esperar que algún día, el régimen nos atienda, y acepte la invitación que le hacemos a dialogar. Pero la obsesión con el diálogo no es única, la otra es la obsesión electoral. Otra lección bien aprendida del galáctico, pensar que podemos ganar una elección, por demás, una ilusión. Ya tibi y su séquito deben estar trabajando en cómo ganar sin ganar. Y así será. Quizá por ello duda cuando dice que “si en las próximas elecciones parlamentarias nace la nueva mayoría que hay razones para esperar, vendrá una difícil etapa de negociaciones y diálogo para revertir el desastre de la revolución”. El régimen ha implantado un Estado paralelo al que se describe en la Constitución nacional, y se hace cada vez más fuerte. A los colectivistas no les importa las mayorías, eso es para los demócratas. A ellos solo les interesa imponer sus ideas, bajo la premisa de que el pueblo no sabe lo que quiere y necesita, sólo ellos lo saben. Mientras desde la oposición piensan en diálogo, el régimen decreta el uso de armas por parte de la fuerza armada en las manifestaciones públicas, contraviniendo varios artículos de la Constitución, fortaleciendo el Estado paralelo, cada vez más parecido al régimen cubano. Mientras Carlos Raúl insiste en diálogo, el régimen expropia Farmatodo y detiene a su Junta Directiva, convirtiendo en delincuente a quien invierte en el país, al empresario, al emprendedor, a cualquiera que aspire tener un negocio y obtener beneficios económicos. Creer que somos afortunados porque “los jefes políticos de la Unidad, con sus errores y aciertos, demuestran que no están divirtiéndose como aficionados a la política en mensajes de 140, sino que han apostado sus existencias a mantener viva la posibilidad de cambio”, es todo lo contrario, ¡como tuitean! Practican con devoción la protesta virtual. Y no me refiero a Chuo, hombre de los barrios que espero no pague los platos rotos de la inacción, conformismo e ¿ingenuidad?, de Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo y Acción Democrática. El Estado paralelo del régimen ha llegado, a donde ha llegado, con la anuencia de la MUD y la mayoría de los partidos políticos que la componen. Al ritmo que vamos, si no reaccionamos con fuerza, más no con violencia, si no alzamos nuestra voz, estaremos prisioneros en nuestro país, y habremos perdido “la libertad, el don más preciado de los humanos”.